Roberto Kohanoff

Soy arquitecto y humanista, desde joven construyendo espacios no violentos físicos y mentales de meditación donde se forman voluntarios constructores de comunidades del Mensaje de Silo.

 

El despertar conjunto. En los ’70, me resonó un futurible: “un día la familia humana estará comunicada y se conocerá al instante lo que suceda en otras regiones y cuando esa conciencia cubra el planeta, un puñado de seres de distintas generaciones, empezará el despertar conjunto al reconocer que “yo existo porque tú existes”. A ese despertar conjunto estamos invitando desde la red de espacios no violentos.

 

La intención compartida. Desde jóvenes intentamos cambiarnos sin depender y al mundo sin violentar, formando comunidades. Participamos del cambio con alegría experimentando nuevos modos de vivir en libertad integrando los cambios en el mundo y en nuestras vidas. La Regla de Oro nos impulsa a tratar a las distintas generaciones como queremos ser tratados. No queríamos que nos impongan paisajes y no los imponemos, aceptamos sensibilidades nuevas, avanzando hacia la unidad de la diversidad. Una dirección da sentido a nuestra vida mientras aprendemos a superar el sufrimiento personal compartiendo ese aprendizaje. Al acelerarse el proceso humano, las formas conocidas pierden validez, pero mantiene vigencia tratar a los demás como queremos ser tratados, postura ética que nos considera a todos pares. Estamos construyendo una nueva especie por prueba y error, corrección y nueva prueba, con la intención compartida en la red de espacios no violentos entre personas de distintas generaciones y situaciones.

 

La acción convergente. Amplía la red de espacios no violentos. En los ’60 nos iniciamos formando grupos pacifistas. En los ’70, basados en la Psicología de Silo, construimos comunidades y la Sala de Meditación experimental. En los ’80 en Argentina coordinamos la Comunidad para el Desarrollo Humano y desde el Movimiento Humanista, con la no violencia activa aportamos al cambio social, político y cultural. Impulsamos una nueva ecología desde los partidos Humanista y Verde Ecologista Pacifista. En los ’90 contribuimos a la expansión del Humanismo Universalista. En los 2000 participamos en la Asamblea Humanista. Diseñamos los primeros Parques de Estudio y Reflexión. Profundizamos nuestra inspiración experimentando las Disciplinas. Impulsamos la Marcha Mundial por la Paz y No violencia. Hoy compartimos prácticas de la Regla de Oro y el trabajo en equipo formando comunidades intencionales no violentas. Con esta web y las redes sociales compartimos la acción convergente en  red hacia el mejoramiento personal, de nuestras relaciones y de la humanidad con el Mensaje de Silo.

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